Se trata de un juego de rompecabezas que utiliza simpáticas imágenes de animales de dibujos animados y tiene 6 niveles de dificultad. El objetivo es sencillo y como en todos los juegos de puzzle, los niños tienen que completar la imagen utilizando las piezas que se les dan. El juego está diseñado de manera que sea fácil de resolver para los niños y para que no se frustren al resolver el rompecabezas. Por ejemplo, sólo se dan cuatro piezas a los niños para que las elijan al mismo tiempo y no se confundan.